EL 250 ANIVERSARIO DEL CUARTEL DE DOLORES DE FERROL
Artículo publicado en la REVISTA DEL TERCIO DE VETERANOS del mes de octubre de 2021
El día 21 de octubre de 2021 se celebró el acto del 250 aniversario de la entrada en servicio del Quartel de Dolores de Ferrol, sede del Tercio del Norte y actualmente el acuartelamiento más antiguo en uso de España, y nos atreveríamos a decir que de Europa.
Desde que, en 1726, la ciudad de Ferrol fuera declarada capital del Departamento Marítimo del Norte, comenzaron a servir allí Batallones de Marina que, de forma temporal, eran destacados desde Cádiz. No sería hasta 1749 cuando se destinarían a Ferrol a los Batallones de Marina 5º y 8º. Dos años más tarde, en 1751, en unos terrenos ganados al mar de la ría de Ferrol, y cedidos por el Cabildo de Mondoñedo, en el monte de Esteiro, el día 8 de marzo dio comienzo la construcción de un edificio para alojar a esos dos Batallones de Marina que se encontraban en el acuartelamiento provisional del Campo de San Roque, siguiendo un primer proyecto delineado por el ingeniero Joseph Petit de la Croix.
Lamentablemente en 1753 se paralizaron las obras cuando su altura apenas llegaba a las primeras ventanas, las cuales no se reanudarían hasta 1766, ya con el nuevo diseño del ingeniero Julián Sánchez Bort. Finalizaría su construcción el día 15 de octubre de 1771.
Su estructura consta de tres cuerpos sobre una planta cuadrada, diseñado para alojar a 4.000 hombres. Los materiales empleados fueron piedra sillar y mampostería en blanco y cuenta con 377 ventanas. La obra ascendió a un millón de reales, al parecer donados por los señores de Andrade en memoria de un hijo que, siendo infante de marina, murió en combate contra los ingleses (por ese motivo, la corona del escudo de la fachada es la de la Casa de Andrade). Se le llamó “Quartel de Dolores” por el gran fervor que en esa época se le procesaba a esta Virgen. Allí se destinarían a los Batallones de Marina 10º y 11º, ampliándose en 1783 su entidad a cuatro Batallones: el 8º, 9º, 10º y 11º.
Desde entonces, este mítico acuartelamiento ha acogido siempre a Tropas de Marina, siendo testigos sus arcos de los miles de infantes de marina que, en algún momento de nuestra historia, salieron por la puerta de prevención para participar en las muchas acciones en las que se ha visto envuelto el Cuerpo a lo largo de sus casi 485 años de entrega a España.
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